Derechos Humanos: aumentaron las resoluciones judiciales en beneficio de represores

La Justicia benefició a cuatro condenados por crímenes de lesa humanidad. La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación expresó su preocupación

La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación expresó su preocupación por el aumento de las prisiones domiciliarias y libertades condicionales concedidas por la Justicia Federal a represores condenados por crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura cívico militar. 

A través de un documento compartido en redes sociales, el órgano que encabeza Horacio César Pietragalla Corti advirtió sobre la situación luego de conocerse que los genocidas Santiago Riveros y Jorge Eduardo Acosta podrían quedar en libertad condicional. Los condenados actuaron en los centros clandestinos de detención que funcionaron en Campo de Mayo y en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), respectivamente.

"La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación ve con preocupación el aumento de las prisiones domiciliarias y libertades condicionales dispuestas por la Justicia Federal en casos de personas procesadas y condenadas por crímenes de lesa humanidad durante el terrorismo de Estado", indica el comunicado dado a conocer el jueves por la tarde.

En ese sentido, consideró que "los crímenes investigados en estas causas representan graves violaciones a los derechos humanos que el Estado argentino tiene la obligación de investigar, juzgar y sancionar, y cuyas penas deben ser cumplidas de manera efectiva y completa como parte de la reparación a las víctimas y a la sociedad". 

Resoluciones judiciales en beneficio a represores

A principios de junio, la Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada por Guillermo Yacobucci y Ángela Ledesma, consideró que el cálculo de la pena de Jorge Eduardo Costa se debe realizar con la ley más benigna. De este modo, el genocida de la ESMA accedería al beneficio que establece que con 20 años cumplidos un condenado a prisión perpetua puede acceder a la libertad.

El mismo tribunal había dictado un fallo a favor de Santiago Omar Riveros, condenado por secuestro, torturas y desaparición de personas, otorgándole la libertad condicional. En los últimos tiempos también fueron beneficiados con domiciliarias otros dos represores: Mario Guillermo Ocampo y Luis Firpo, condenados a prisión perpetua en el juicio de la Contraofensiva.

En este contexto, desde la Secretaría de Derechos Humanos recordaron que, en los últimos años, según datos del Ministerio Público Fiscal, se profundizó el otorgamiento de estos beneficios y apenas un tercio de las más de 2200 personas investigadas o condenadas por crímenes de lesa humanidad se encuentra detenida.

Detalla, asimismo, que una "gran mayoría" de los represores detenidos cumplen sus penas bajo el régimen de prisión domiciliaria (565) y que tan sólo 185 cumplen la pena o la prisión preventiva en un establecimiento penitenciario.