Crimen del kiosquero en Ramos Mejía: tensión e incidentes durante marcha de vecinos y familiares
Familiares y vecinos del kiosquero asesinado a balazos durante un asalto en Ramos Mejía se manifestaron el lunes por la tarde frente a la comisaría, en una marcha que derivó en serios incidentes entre la policía y los manifestantes. Al igual que sucedió el domingo por la noche, los vecinos intentaron ingresar a la sede policial para pedir explicaciones, pero un cordón de efectivos de la fuerza les impidió el paso en medio de tumultos.
Poco después de las 20 se registraron choques entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes, quienes respondieron con piedras a los gases lacrimógenos lanzados por las fuerzas de seguridad. Al atardecer, cuando el escenario era más calmo, hablaron ante las cámaras de televisión los hijos de Roberto Sabo, el comerciante acribillado.
“Me sacaron a mi papá. Me quiero ir del país. Todos los días venía a laburar, de domingo a domingo, hace más de 25 años”, expresó Tomás, uno de los hijos del kiosquero. “Laburaba todo el día y, además de ser mi compañero de trabajo, era mi amigo, mi jefe. Era todo. Siete años laburando para comprarse su casa, darnos todo a nosotros. A veces le discutía para que cerrara los domingos. Pero él nos quería dar lo mejor. Uno se da cuenta de que lo mataron por laburar”, agregó Nicolás, otro de los hijos de la víctima.
Durante la marcha, que fue convocada a través de las redes sociales, los presentes entonaron cantos contra las autoridades municipales, provinciales y nacionales, entre ellos Sergio Berni, ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, quien este lunes habló del hecho. “Creer que el problema de la inseguridad pasa solamente por la policía, está mal. La provincia tiene una enfermedad endémica que es la inseguridad, que se arrastra desde hace años producto de la desinversión y desinterés en la materia”, expresó en declaraciones radiales.
El crimen del kiosquero en Ramos Mejía
El hecho ocurrió el domingo, minutos después de las 14, cuando los dos delincuentes, Suárez, de 29 años, y la adolescente de 15, llegaron hasta el comercio de avenida de Mayo al 800 de Ramos Mejía, en el partido de La Matanza, y mataron a Roberto Sabo. Para huir, le robaron el coche a un remisero y la moto a un delivery, pero chocaron. Ambos ingresaron a un supermercado de la zona para camuflarse pero no les sirvió de mucho: fueron detenidos.
Uno de los ladrones, Suárez cumplió una condena de 5 años y 10 meses de prisión y había salido hace 14 meses de prisión. Lloró este lunes ante el fiscal Federico Medone, de la UFI Temática de La Matanza, se negó a declarar, pidió que no le den perpetua y quedó alojado en otra seccional de la jurisdicción. Para la adolescente, que es inimputable y está embarazada, el fiscal del fuero juvenil pidió que le apliquen una medida de seguridad. La Justicia de menores lo resolverá este jueves.
